Este sábado pasado, maese-cervecero Alfonsito, Capacha, Edu y un servidor (Forillo), hemos visitado la cervecera Casasola en Valladolid, aprovechando un cupón de descuento, que por cierto, se me DEBE!!!
He de decir que nos costó un poco encontrar el sitio, ya que en el mapa que proporciona la cervecera está equivocado, y que el conductor no era muy espabilado, pero llegamos justo a tiempo.
El sitio está chulo, un gran salón en estilo rústico con chimenea, sofás y barra de bar donde más tarde haremos la cata, y a través del cual se puede ver el local con la maquinaría para elaborar la cerveza, separado por unos grandes cristales.
Cuentan con 2 depósitos con camisa (macerador y hervidor) de 1500 litros de capacidad, en los que se pueden producir hasta 1200 litros por elaboración. Dos tanques de unos 3000 litros, uno de agua fría y otro caliente, y 6 fermentadores cilindrocónicos de 2500 litros. Todo ello controlado mediante un equipo electrónico para la medición de temperaturas y tiempos.
Además cuentan con 2 salas de guarda: una a 20 grados donde se hace la 1ª maduración después de embotellar, y otra a menor temperatura, creo recordar que unos 8 grados más o menos, donde hacen la 2ª guarda antes de la venta del producto.
El sistema de elaboración, más o menos es el habitual de cualquier microcervecería, así que no vamos a extendernos en ello. Llama la atención que todas las botellas son de 75 cl, aunque a partir de este agosto pasado, han empezado a embotellar también en 33 cl.
Como impresiones, diremos que el guía que hizo la visita era el comercial, y algunas cosas que nos contó no concuerdan con la práctica de la elaboración de la cerveza, da la impresión que el maestro cervecero le tiene que dar alguna clase más.
Después de la visita, en la barra del bar, degustamos 3 tipos de cerveza.
Diremos que nuestro aprendiz de maestro cervecero particular, titoChonsi, no estaba muy inspirado, pues duro y dale que estaba probando una de trigo cuando ni siquiera se le acercaba. Yo creo que estaba pensando en otras cosas.......
La cerveza resulta muy bebible, suave, marina con todo, jajaja, y que tienes que golpear bastante en el vaso para que haga buena espuma. Lo acompañamos con un poco de queso y salchichón, y nos regalaron una botellita de 75 cl. a cada uno. Elegante!!
En fin, que pasamos una buena mañana de sábado, habrá que hacer más escapadas de estas.La próxima paga Capacha, eso si!!
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